ayer no pude escribir nada, fue un día muy ajetreado, hice bastantes cosas, mas o menos os cuento.
Desde hace algunos años me uní a un grupo de teatro para gente con y sin discapacidad, fue genial al principio, éramos bastantes personas y nos iba de maravilla, algunas con silla de ruedas, algunas con muletas y otras sin problema, así que nos ayudábamos unos a otros y habíamos hecho varias actuaciones.
A mi me encantó encontrar este grupo, los jueves era un día especial y mágico para mi, era muy tímida para según que cosas me pedían hacer pero poco a poco lo logre, ahora puedo casi asegurar que no me da miedo ni vergüenza hacer algunos papeles, a veces te pones algo nerviosa, sobre todo cuando ves a tantísima gente mirándote, pero me mentalice de tal manera que al mirar hacia adelante solo veía a mis compañeros, no veía al publico y me fue muy bien.
Me sabe muy mal que no haya ido todo bien o no haber encontrado a mas gente interesada en este mundo del teatro de improvisación porque es muy divertido y bonito, la semana pasada volvimos a hacer una clase con profesor nuevo y todo seguía igual, así que ayer fuimos a despedirnos o esperar a crear dos grupos de diferentes niveles, no se que pasará.
Nos pasamos la tarde en una cafetería hablando del tema, dudando, que si, que no, seguimos, dejamos..., al final decidimos dejarlo y quizás de mirar otros grupos, ya veremos.
Es difícil decidir estas cosas porque no quieres hacer daño a algunas personas, son sensibles y enseguida pueden tomarlo a mal, no me gusta hacer daño a la gente, ellos seguirán disfrutando de las clases y veremos mas adelante que pasará.
Pero siempre te sientes algo rara despidiéndote de la gente por este problema en concreto.
Besitos dulces
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